Un nuevo documento presentó el grupo de ex Secretarios de Energía y en él plantearon la necesidad de modificar la matriz energética del país, proponiendo para ello incrementar la utilización de energías renovables, aumentar la eficiencia energética y asumir compromisos regionales y globales para la mitigación del cambio climático.
En su introducción, el documento sostiene que el sector energético argentino mantiene y agrava su crisis estructural, “suficientemente descrita y anunciada con anticipación” en trabajos anteriores del grupo. “Los datos concretos de la producción energética correspondientes a agosto de 2014 nos indican que continúan disminuyendo la producción de gas natural y de petróleo, y que no se producen descubrimientos de nuevos yacimientos de hidrocarburos, todo ello en el marco de un muy fuerte incremento de los subsidios energéticos y una crónica disminución de las reservas de divisas y ausencia de crédito externo”.

En ese contexto, subraya el documento elaborado por los ex secretarios Emilio Apud, Julio César Aráoz, Enrique Devoto, Roberto Echarte, Alieto Guadagni, Jorge Lapeña, Daniel Montamat y Raúl Olocco, “el Gobierno nacional impulsa sin consensos una nueva ley de hidrocarburos unánimemente rechazada hasta ahora por la oposición parlamentaria, detrás de la cual se esconde una estrategia energética unidireccional e inconveniente que podríamos definir como ‘Vaca Muerta, única solución para los problemas de la Argentina’”. Ante ello, creen fundamental “no perder el foco respecto a una cuestión central: la Energía necesita una política integral, concebida con criterio estratégico, y fundada en consensos políticos amplios”.

A juicio de los ex funcionarios, en ese marco juega un rol central la transformación y diversificación de nuestra matriz energética, procurando la sustitución de las energías fósiles por energías renovables, amigables con el medio ambiente y de producción nacional - biocombustibles (etanol y biodiesel de soja); energía eólica; energía hidroeléctrica y energía solar y otras alternativas- , y la eficiencia energética. Y enfatizan que “la implementación de una política de transformación de la matriz y de eficiencia energética requiere de una acción mancomunada entre el Estado y los consumidores, y será siempre una política de largo plazo, con objetivos estratégicos consensuados y permanentes”.

En este apretado resumen del nuevo documento de los ex Secretarios de Energía cabe destacar la importancia que se asigna, en términos políticos y sociales, a la cuestión del impacto ambiental de cada emprendimiento energético. En ese sentido, se enfatiza la necesidad de la aplicación por parte del poder público de una normativa exigente que prevea una eficaz fiscalización, y de transparencia para asegurar que sean debidamente tomadas en cuenta las opiniones de los afectados por la construcción de las obras.

El trabajo cierra con la siguiente definición “Nuestra generación ha recibido la Tierra en préstamo de las generaciones futuras. Preservar el medio ambiente en nuestro país y en el planeta no implica renunciar al crecimiento económico, ya que es posible expandir la producción de bienes y servicios y al mismo tiempo reducir las emisiones contaminantes. Como nación deberemos aportar, en el marco de acuerdos regionales, a una solución global que reduzca las emisiones de gases de efecto invernadero”.